Lo que a continuación voy a expresar es una opinión totalmente subjetiva y fruto de la experiencia del trabajo del día a día.
Yo lo tengo claro. Cuando se trabaja en equipo, todos por un mismo fin, aunque cada uno desarrolle una parte distinta a la del compañero, el ambiente que se respira es maravilloso.
Hace unos días preparamos un proyecto para un concurso. Fueron momentos de tremenda tensión, pero nos apoyábamos los unos en los otros y se consiguió presentar a tiempo.
El trabajo en equipo va más allá de la unión por una meta, pone sobre la mesa nuestros sentimientos, nuestra capacidad de empatía y de saber compartir, y sobre todo nos da la oportunidad de poner en práctica la teoría sobre los valores. Respeto, dignidad, tolerancia son valores fundamentales en los que todo ser humano debería basar su convivencia y en el trabajo ? y más en el trabajo en equipo ? debemos utilizarlos.
A estos valores mencionados voy a añadir dos más, recogiendo lo expuesto por Luis Rojas Marcos y su hija Laura en la conferencia a la que asistí el otro día (ellos encantadores y la charla clarificadora al cien por cien). Nuevos valores: OPTIMISMO (la visión optimista del presente, pasado y futuro) y COMUNICACIÓN.
Tan obvio y que tantas veces se nos olvida.
Pues a partir de ahora propongo que lo recordemos. No sólo con nuestros compañeros, sino en todos los ámbitos de nuestra vida. Si cooperamos, aprenderemos más y mejor y seguro que nos sentiremos más capaces de llegar a la meta común.
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