
Una agencia de RR.PP. la mejor Secretaría Técnica para una asociación
Las labores de una agencia de relaciones públicas como secretaría de un colectivo, asociación profesional o federación suponen una complejidad mayor de la que a priori pudiera parecer. Asumir una secretaría técnica requiere de un amplio abanico de conocimientos y herramientas que permitan abarcar distintas funciones que conlleva. Tareas clásicas tales como la gestión administrativa y contable, el control de cobros, la emisión de facturas, la realización de remesas y gestión de ingresos y gastos. Pero además, implica que en sus manos se encuentra el buen nombre y reputación de las asociación y de todos sus miembros.
En este sentido, desde nuestra posición como empresa de RR.PP. en TARSA tenemos la convicción de que una empresa de este tipo, siempre que los presupuestos de la asociación lo permitan, es la opción más adecuada para asumir las funciones de Secretaría Técnica. Además de todas las tareas señaladas, una agencia especializada en RR.PP. y comunicación puede asumir igualmente la gestión con medios de comunicación para informar sobre la actividad de la asociación, el manejo de las redes sociales o la administración y actualización del contenido del site del colectivo, entre otras muchas labores relacionadas con la gestión de la reputación.
Es cometido de la secretaría técnica dar una visión coherente con los propósitos de la asociación y transmitir los mensajes a sus públicos de la mejor manera posible. Por este motivo, es oportuno y necesario que la comunicación – above y below the line y social media -, tanto a medios como a los propios asociados, se centralice en la misma empresa buscando ese fin: la coherencia en la información y en las acciones.
Así, una empresa de RR.PP. posee versatilidad y polivalencia suficiente para desempeñar estas funciones. Su equipo de trabajo suele estar formado en las diferentes áreas, además de sumar a la formación la gran experiencia en la gestión en el sector de las relaciones públicas y comunicación.
Se requiere pues un equipo multidisciplinar con experiencia para llevar a cabo dicho servicio, así como disponer de todas las herramientas necesarias para su desarrollo. Y por supuesto, una implicación directa para conseguir que los fines de la asociación sean asumidos como propios.